Guerra entre tecnologías. Pila de combustible o batería.

Las últimas noticias internacionales muestran un panorama muy, pero que muy interesante. Mientras las multinacionales alemanas, como el grupo Volkswagen y Daimler apuestan por los vehículos eléctricos de batería, las gigantes japonesas Honda Motor y Toyota Motor apuestan por la tecnología de hidrogeno y pila de combustible, la guerra entre tecnologías está servida.

Desde un punto de vista totalmente desinteresado, se puede llegar a la conclusión de que o la tecnología de las baterías electroquímicas evoluciona exponencialmente o está claro que  las multinacionales alemanas tienen muchas papeletas para perder este choque de titanes ya que la tecnología eléctrica a batería tiene numerosos inconvenientes con respecto a la de pila de combustible. 

Por un lado tenemos la autonomía, un vehículo de pila de combustible puede conseguir autonomías similares a los actuales (400- 600 km por deposito), mientras que uno eléctrico a batería consigue autonomías entorno a unos 100-140 km. En este aspecto el vehículo a batería solo cubriría las necesidades de movilidad en el entorno urbano.

Por otro lado está el problema del repostaje, mientras un deposito de hidrogeno se puede recargar completamente en unos 5 minutos (tiempo similar al repostaje de combustible actual), la recarga del 85% de una batería de ion-litio con en una estación de carga rápida tarda unos 15 minutos, en el mejor de los casos, y no es seguro que este tipo de recarga no dañe las baterías.

Con estas simples apreciaciones parece ser que el coche eléctrico tiene la batalla perdida. Esto como todo, es relativo. El vehículo eléctrico también tiene sus bazas. Un eléctrico se puede cargar en nuestro domicilio y todo apunta a que el coste a los 100Km (entorno a 2€) será menor que el coste para los mismos kilómetros en el caso del hidrogeno (entorno5-7€/kg ). Además el coste del vehículo eléctrico es, por el momento, menor que el vehículo de pila de combustible debido al elevado precio de algunos de los componentes de lo pila de combustible.

La lista de argumentos a favor y en contra de una tecnología puede ser muy larga e interesante, pero al final, y en mi humilde opinión, se llega a la conclusión de que la tecnología de la pila de combustible será la que se imponga en el medio-largo plazo mientras que en el corto plazo la tecnología del eléctrico a batería es la que tiene más papeletas para triunfar en vehículos para movilidad urbana y competirán en el mercado con los híbridos y los de combustible.